Lágrimas. Aquellas gotas de agua que no provienen del mar pero que tienen un sabor salado. Aquellas que salen nuestros ojos y ruedan por nuestro rostro hasta caer en el olvido.
No te diré que no llores, porque yo también tuve lágrimas en mis ojos. No derramarlas cuando lo necesitas es lo peor que puedes hacer, no sirve guardarlo todo en tu interior, así solo conseguirías que te inunden el alma.
Las lágrimas no son destructivas, sino regenerativas. No consiguen hacerte olvidar tus problemas pero ayuda a silenciarlos.
Si tienes que llorar, llora. llorar no es una muestra de debilidad sino la fuerza que derramas para poder vivir de nuevo...
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